Calidad del aire en interiores

Cómo Medir la Calidad del Aire Interior de tus Edificios

La preocupación por la calidad del aire interior de los edificios ha crecido este último año, sobre todo ahora que vamos volviendo poco a poco las oficinas, al interior de restaurantes, y edificios de uso público en general. Y es que, los posibles virus en el ambiente son los únicos factores que afectan al bienestar de los usuarios, además existen otros y pueden ser medidos y controlados para mejorar la calidad del aire. 

Descubre qué debes tener en cuenta y cómo medir la calidad del aire interior de tus edificios a continuación: 

New Call-to-action

Qué es la Calidad del Aire Interior y qué Factores Influyen

Tener una buena calidad ambiental interior en tus edificios es esencial, ya que influye en el bienestar de los usuarios que lo ocupan. 

Según la norma UNE 171330:2008, la Calidad Ambiental en Interiores se define como “las condiciones ambientales de los espacios interiores, adecuadas al usuario y la actividad, definidas por los niveles de contaminación química, microbiológica y por los valores de los factores físicos. Se excluye del campo de aplicación de esta definición a los recintos destinados a uso industrial y/o agrícola”. 

Dentro de la Calidad Ambiental en Interiores o CAI, deberás evaluar la Calidad del Aire Interior de tu edificio.

Y para poder evaluar la calidad del aire, debes tener en cuenta una serie de parámetros que miden diferentes fuentes de contaminación a los que estamos expuestos. Estos parámetros son principalmente el Dióxido de Carbono (CO₂), la humedad relativa, la temperatura interior, los famosos Compuestos Orgánicos Volátiles (COVs: productos de limpieza, de desinfección, pinturas, recubrimientos, …), las partículas PM2.5 y PM10 (polvo en suspensión – el número hace referencia al diámetro en micras),  y los contaminantes biológicos como la presencia de virus, bacterias, hongos, etc.  

Efectos de los contaminantes de aire de interiores en la saludPor qué Medir la Calidad del Aire Interior de tus Edificios

Que la contaminación del aire es una de las principales causas de enfermedades relacionadas con el sistema respiratorio y cardiovascular, no es nada nuevo. 

Pero, quizás te sorprenda saber que gran parte de estos contaminantes los absorbemos en espacios interiores. Y es que pasamos de media un 90% de nuestro tiempo dentro de los edificios.

Es más, según datos del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSST), actualmente en los países industrializados, los habitantes de las ciudades pasan entre el 60-80% de su tiempo en espacios cerrados, por lo que una mala calidad del aire interior puede afectar de manera seria a las personas.

Por ejemplo, si hablamos de COVID 19, el 75% de los contagios se producen en espacios cerrados. 

A esto debemos sumarle, que los contaminantes encontrados en los ambientes interiores son los causantes de problemas en el usuario como falta de concentración, reducción de la productividad, aumento del absentismo laboral, e incluso estrés y depresión. Por ejemplo, superar una concentración de 1.000 ppms (partículas por millón) de Dióxido de Carbono en el espacio de trabajo te provocará dolores de cabeza y una pérdida de rendimiento. ¿Nunca has salido de una reunión con dolor de cabeza? Pues seguramente la causa sea ventilación insuficiente de la sala.

De hecho, cuando más el 20% de los ocupantes presentan síntomas adversos de salud, los cuales desaparecen o remiten cuando se abandona el edificio, se habla del Síndrome del Edificio Enfermo.

Por lo que, que el aire interior de tus edificios se mantenga limpio y de alta calidad  es fundamental para la salud de las personas que lo usan.

En conclusión, uno de los principales motivos por los que deberías medir la calidad del aire interior de tus edificios es el poder controlar sus valores, asegurando la comodidad y la salud de sus usuarios, y reduciendo a su vez todos los efectos adversos mencionados anteriormente. 

No debemos olvidar que, desde un punto de vista energético, las decisiones que lleve a cabo tu equipo de gestión energética y mantenimiento respecto a la mejora en la eficiencia energética de tus edificios, también aportarán una mejora en la Calidad Ambiental del Interior.

Por ejemplo, en el caso del control de infecciones como el Covid 19, los Facility Managers de tu compañía pueden saber qué zonas tienen condiciones ambientales deficientes o un mayor riesgo de transmisión de virus en el aire, mediante la supervisión de la calidad del aire interior en habitaciones y espacios individuales. Este artículo publicado hace unos meses en el periódico El País explica de forma muy visual la importancia de la calidad del aire en interiores en relación al Covid 19.

Por otro lado, poder evaluar la calidad del aire, ayudará al gestor energético junto al equipo de mantenimiento a detectar sistemas deficientes de ventilación, que no solo serán el causante de la mala calidad del aire, sino que además pondrán en evidencia sistemas poco eficientes en consumo energético.

No olvidemos que aumentar los niveles de renovación de aire conlleva en la mayoría de casos al aumento de consumo energético debido a que el aire que introducimos en el edificio debe ser tratado para adecuarlo a las necesidades del mismo. Medir de forma continua y regular las renovaciones según los parámetros de calidad del aire interior nos permitirá lograr el objetivo de mantener una excelente calidad del aire garantizando el mínimo consumo energético.

Y ¿qué dice la Legislación al respecto de la calidad del aire en los edificios de uso público?

A nivel europeo sí que existe legislación relacionada con la ventilación y la concentración de dióxido de carbono, así como del humo del tabaco, en edificios de uso público. Pero, no existe nada específico respecto a la calidad del aire interior.

En cambio, España es uno de los países pioneros en este aspecto, ya que si tiene algunas regulaciones relacionadas con la calidad del aire interior. 

Una de ellas, es el Reglamento de Instalaciones Térmicas de los Edificios, más conocido como RITE, (actualizado recientemente en el RD 178/2021) que establece las exigencias mínimas en eficiencia energética y seguridad relacionadas con la calidad del aire interior de los edificios según su uso (si es un hospital, una oficina, un colegio, un local). Además, obliga a todos los edificios de uso público a inspeccionar al menos 1 vez al año la calidad del aire de sus instalaciones.

Otra normativa que deberás tener en cuenta es el Código Técnico de Edificación o CTE, donde encontrarás definiciones y requerimientos del ambiente interior que debe cumplir tu modelo de edificio, además de las concentraciones máximas de contaminantes. Todo con el fin de establecer unas exigencias mínimas de salubridad, donde los sistemas de ventilación son clave. 

Cómo Medir y Controlar la Calidad del Aire Interior de tu Edificio

Una de las formas de asegurarte que tus edificios cumplen con los niveles de calidad ambiental y calidad de aire interior es que cuenten con estándares como:

  • UNE 171330-1:2008: este estándar te dará las directrices para alcanzar una adecuada calidad ambiental en los interiores de tus edificios, así como todos los aspectos relacionados con su auditoría.

También encontrarás normalizados métodos de muestreo, inspección y control de los contaminantes en interiores, así como una lista de buenas prácticas.

  • RESET Air: esta norma define los requisitos para la monitorización continua de un espacio interior o de un edificio, incluyendo el despliegue de monitores, las especificaciones de los mismos, los requisitos de instalación, los requisitos de notificación de datos y de la plataforma de datos, y los requisitos de calibración. Además, la norma establece objetivos de rendimiento que pueden ser certificados por terceros.

Lo ideal es que uses una herramienta de monitorización de la calidad del aire interior que te permita medir y controlar los diferentes parámetros en un período determinado. La nueva funcionalidad “Calidad de aire interior de la plataforma Dexma, te permite justamente esto, monitorizar los indicadores de calidad del aire.

En este caso la elección del hardware es importante, ya que cada vez hay más oferta en el mercado con variedad de opciones y no todas ellas pueden satisfacer tus necesidades. 

Lo más importante, como siempre, es que las sondas en cuestión se comuniquen mediante un protocolo abierto, para poder visualizar y analizar tus datos en cualquier plataforma. Una vez realizado este filtro, podemos listar las características que determinarán tu elección:

  • Comunicación: Comunicación cableada (Modbus, LonWorks, BACnet, etc) o comunicación inalámbrica (WiFi, Sigfox, LoRa, Zigbee, etc). 
  • Alimentación: Sondas alimentadas con pilas alcalinas, con pilas recargables, con baterías o alimentadas eléctricamente.
  • Pantalla/Display: Sondas con display (los usuarios pueden visualizar los parámetros en la misma sonda) o sondas sin display (solo las personas con acceso al software de visualización pueden ver los datos). Algunas sondas también pueden tener algunos indicadores cualitativos en forma de LED de colores.
  • Variables a medir: Hasta ahora lo más común era encontrarse en el mercado con sondas que miden temperatura, humedad y CO₂. Como ya se ha comentado anteriormente hay otros parámetros determinantes a la hora de garantizar una buena calidad de aire, como pueden ser las partículas o los compuestos orgánicos volátiles. 

Según las características elegidas para tu proyecto, el coste del hardware y el coste de instalación del mismo, podrá variar mucho. Concretamente para el hardware el factor que más influye en su precio sería el número de variables a medir, cuantas más variables más cara será la sonda. Mientras que los factores que más influyen en el coste de instalación serían el protocolo de comunicación del hardware instalado y su alimentación.

Una vez tengas tus sondas instaladas podrás visualizar datos de temperatura, humedad, CO₂, PM2.5, PM10 y TVOC. Su funcionamiento es muy sencillo, solo tienes que seleccionar los dispositivos que quieres analizar, el período de visualización de datos, y si lo necesitas, añadir un filtro horario como las horas laborales de tu oficina, y hacer clic: 

¡Tachan! Tendrás tus datos visuales en una gráfica. 

Para que lo entiendas mejor, a continuación encontrarás 3 casos de uso en los que necesitarás conocer los datos de calidad del aire.

3 Casos de uso donde necesitarás Datos de Calidad del Aire

Son múltiples los momentos en los que puedes requerir saber qué está pasando con el aire que respiras, y seguramente dependerán del tipo de negocio o edificio que gestiones. Sin embargo, a continuación te explicamos tres casos de uso habituales que hemos visto durante el último año.

Caso 1: Necesitas saber si ventilas bien o no

Es lo que todo el mundo quiere asegurar hoy en día. ¿Estoy ventilando suficiente? ¿No llego? ¿Me estoy pasando? 

Instalando sensores de niveles de dióxido de carbono nos indicará las partículas por millón (ppm) que tenemos en cada momento. Puedes instalar sondas en diferentes lugares de tu instalación y comprobar que los equipos de ventilación forzada (máquinas de clima) o la ventilación natural (abriendo ventanas) es suficiente o no. Para ir bien, deberías estar en el rango de 400-800 ppms. 

Una vez estés recogiendo datos, podrás pedir al sistema que te muestre los niveles de CO₂ para todas tus sondas, o solo las de una planta, o las de una sala de reuniones. Verás algo así:

Funcionalidad Calidad del Aire Interior de DEXMA  

Parece que durante la semana que muestra el gráfico no hay ningún momento en el que se haya superado los 1000 ppm de Dióxido de Carbono. Igualmente, la sonda situada en la segunda planta (second floor – verde) es la que más riesgo tiene, y deberemos estar atentos.

Al combinar datos como la temperatura, el CO₂ y la humedad relativa obtendrás información esencial sobre la seguridad y el confort en los espacios de trabajo de tus edificios. Los datos también proporcionan una indicación sobre cómo gestionar y reducir el riesgo, como aumentar o cambiar los sistemas de ventilación o establecer límites de ocupación en salas específicas.

Si además añades tus consumos energéticos, podrás analizar qué equipos de renovación de aire son los más eficientes o detectar cuando uno de ellos empieza a reducir su eficiencia.

Caso 2: Quieres saber cuando en un espacio de tu edificio se supera el límite de niveles de Dióxido de Carbono

Si tenemos una sonda en la segunda planta que monitoriza en tiempo real, ¿Por qué no configurar una alerta y que te avise si superamos los 1000 ppms? Pues eso es exactamente lo que vamos a hacer. Vamos a configurar una alerta y, en caso de llegar a la zona de peligro, que envíe un correo al Facility Manager o responsable de mantenimiento para que accione la ventilación. Con DEXMA quedaría algo así:

 

Además, la matriz que vemos (verde y roja) te permite seleccionar sobre qué horas quiero que la alarma esté activa. Configuramos para que salte solo de 7 a 19h de Lunes a Viernes, que es cuando hay actividad en el edificio.

Caso 3: Quiero que mis usuarios estén tranquilos y confiados que el aire es saludable

Poco a poco estamos volviendo a nuestros lugares de trabajo y a volver a hacer vida social. Ahora tenemos más claro que nunca la necesidad de la higiene y disponer de espacios bien ventilados, ya sea en oficinas, restaurantes, supermercados, escuelas, bibliotecas, tiendas, etc. Necesitamos confiar en que los espacios donde entramos están en la mejor condición posible, y es por este motivo que podemos usar una visualización en formato pantalla grande para demostrar que el aire que respiramos está limpio. 

Por ejemplo, usando una visualización de este tipo y mostrándolo en la entrada del edificio, donde se da una “nota” entre 0-100 a la calidad del aire, y además se indican los parámetros importantes de calidad de aire interior.  

Dashboard Monitorización Calidad del Aire Interior DEXMAEsto te servirá para ser transparentes y demostrar que estás haciendo bien tu trabajo, y que la gente se puede sentir segura.

Cómo puedes observar, contar con una solución de gestión energética que añada valor a tus acciones en eficiencia como es la monitorización de la Calidad del Aire Interior de los edificios que gestionas, es un plus para la salubridad de sus usuarios. Si buscas una herramienta que cumpla todas estas características, y muchas más, entra a la demo y conócela por dentro.


Nota del Editor – Este artículo ha sido redactado con la colaboración de 2 de los grandes expertos en software y analítica energética de Dexma:

Nil Bufí, Gestor Energético, forma parte de la Dirección de Proyectos de Dexma desde 2018. Su amplia experiencia en la gestión eficiente de la energía en edificios aporta un gran valor añadido al ahorro de nuestros clientes y al desarrollo de nuevas funcionalidades para la plataforma.

Daniel Utges, ex Director de Producto de Dexma. Su camino en Dexma se inició como Product Engineer, pasando por Director de Servicio al Cliente, hasta convertirse en el Director del Departamento de Producto en 2013.

DEMO software de gestión energética DEXMA